• altura de la viña: 350-550 m
  • hectáreas de viña: 5.500
  • pluviometría anual: 450 mm
  • temperatura media anual: 14,8°

La tradición vinícola en Terra Alta se remonta miles de años atrás. Tanto es así, que la investigación arqueológica ha permitido descubrir lo que sería la almazara de vino más antigua de Cataluña, datada del siglo III aC en los vestigios ibéricos del Coll del Moro (al lado de nuestra bodega Herència Altés).

La Denominación de Origen Terra Alta (DOTA), pero, se organizó muchos años después. Cientos de años de tradición agrícola y elaboración de vinos dieron lugar a la necesidad de incorporar un organismo que ayudara en la organización, control de calidad y comercialización del vino resultado del trabajo que se había ido consolidando generación tras generación en nuestras tierras. Así nació la DO Terra Alta, en 1985.

Localización

La DO Terra Alta es la zona más meridional de la vitivinicultura catalana y comprende los 12 términos municipales que configuran la comarca. La zona de producción está delimitada por todo el sistema montañoso que la separa de la depresión del río Ebro en territorio catalán. Desde Ports d'Horta por el sur, y las sierras de Pàndols y Cavalls al sureste, las viñas van encajando hacia el norte y el oeste con la variada orografía del territorio, a menudo emplazadas en terrazas protegidas de la erosión por los márgenes de piedra seca. 

Clima y suelos

La climatología, con abundante insolación y pluviometría escasa, reivindica el carácter mediterráneo de interior de los vinos de Terra Alta.

La altitud media de las viñas oscila entre los 350 y los 550 metros, y la climatología de la zona de producción es mediterránea con ciertas influencias continentales. Por su latitud, la insolación es elevada durante todo el año y permite un buen desarrollo vegetativo de la viña. La pluviometría media está en torno a los 400-450 mm anuales.

Cabe destacar el importante papel del equilibrio de los dos vientos dominantes en la viticultura de la comarca, manteniendo las cepas y los racimos libres de humedades. El Garbí, una suave brisa marina, y el Cierzo, un viento seco proveniente del noroeste. Gracias a esto, la incidencia del mildiu en la viña y la podredumbre de la uva es escasa, facilitando así una viticultura ecológica, sostenible y respetuosa con el entorno.

El suelo de cultivo es en general de texturas medias, con buen drenaje, de profundidad variable, rico en caliza y muy pobre en materia orgánica.

Hay 17 tipos de suelos diferentes en Terra Alta, destacando el panal, un suelo de origen desértico de hace 60 millones de años y se caracteriza por ser de arena fina y limos y de un color blanquecino que, reflejando el sol en él, ayuda a la correcta maduración de la uva.   

Variedades

El predominio de las variedades de uva tradicionales es la otra característica relevante de la viticultura en la DO Terra Alta, y es a través de las Garnachas su punto más evidente. La Garnacha Blanca, la Garnacha Negra y la Garnacha Peluda son las variedades de uva predominantes, que junto con la Macabeu, Parellada y Cariñena, suman las tres cuartas partes de la superficie del viñedo.

Garnacha Negra

Garnacha Peluda